En los últimos años debido a las dos crisis que se han existido desde el boom hipotecario del año que comenzó en el año 2000, han existido numerosos cambios en el sector hipotecario y en la oferta de préstamos para la compra de viviendas.
Muchos de estos cambios han llevado a un cambio sustancial en la vida de las hipotecas, condiciones, plazos y cuotas, que se deben de tener en cuenta a la hora de solicitarlas, pues es bueno saber cómo han evolucionado a lo largo de los años para tener en cuenta lo que ya ha pasado y puede volver a pasar
Menor oferta de préstamos hipotecarios
Debido a la crisis del 2008, y los impagos y quiebras de numerosas entidades financieras, la oferta y competencia en el mercado es sustancialmente menor a la que existía a principios de este sigo.
Entidades de menor y mayor peso han ido desapareciendo sucesivamente y las cajas de ahorro, que antes eran numerosas, han desaparecido casi por completo, a excepción de un par de casos.
Esto ha llevado a que la competencia sea menor y sea más complicado conseguir un préstamo hipotecario si la entidad del cliente deniega la operación.
Que varias entidades denieguen el préstamo, incluso después de tasar resta muchas opciones de conseguir la hipoteca, por lo que, si se llega a este extremo, es recomendable el asesoramiento especializado, antes de quemar todas las posibles opciones por equivocación
Las hipotecas a tipo fijo
Debido a los bajos tipos del Euribor, llevando varios años en negativo, las entidades han pasado a ofrecer tipos fijos a muy largo plazo, de hasta 30 años, y con unas condiciones muy favorables.
No es nada extraño ver tipos fijos a 30 años inferiores al 2%, lo que si bien el Euribor está más bajo que nunca, y se paga más en tipos variables, la seguridad prevalece en muchos casos al hipotecarse.
Actualmente, todas las entidades realizan más del 50% de los préstamos a tipo fijo, llegando algunas entidades a niveles superiores al 80%, como en el caso del Banco Sabadell.
Actualmente, ninguna entidad realiza más préstamos hipotecarios a tipo variable que fijo.
El plazo de amortización
Actualmente el plazo de amortización de las hipotecas ha cambiado sustancialmente.
Si bien muchas se siguen formalizando a 30 años, tradicionalmente siempre se amortizan antes.
Hace unos años, el plazo medio de vida de una hipoteca era de 17 años, pero actualmente, este periodo se ha incrementado superando los 24 años.
Este cambio puede darse por diversos factores, como el aumento del importe de la hipoteca media en un 30%, por lo que se tarda más en pagar o los bajos tipos de interés, que llevan a que en muchos casos desaparezca la premura para la cancelación del préstamo hipotecario.
Las vinculaciones obligatorias de los préstamos
Con los nuevos préstamos hipotecarios, no existe obligación de vinculación de productos asociados a la hipoteca.
Según la nueva normativa hipotecaria, cada vinculación debe de estar clarificada claramente la bonificación por contratarla, por lo que queda claro el coste de contratarla o no, siendo de libre elección para el cliente
Hipotecas al 100%
Si bien era un producto habitual hasta hace unos años, cada vez es más complicado de conseguir y está más restringido en el mercado hipotecario.
En la actualidad, la mayoría de los préstamos se dan al 80% del menor de los dos valores, el de tasación o el de compra.
Esto lleva a que se deba tener un 20% de la propiedad que se compra más los gastos, algo que, en zonas con un mercado inmobiliario al alza, no se puede conseguir en muchos casos.
Esto lleva a que se solicite en ciertos casos préstamos por encima del 80%, lo cual permite comprar casa sin ahorros o con ahorros.
Este cambio de tendencia, aportando más ahorro por norma general los compradores son cada vez más habitual y complicado de conseguir una hipoteca al 100% o 100% más gastos, aunque sigue siendo posible con un asesoramiento profesional e inmobiliario.